24.5.06
R.E.M.
(Basado en una historia real)
- A ver, comencemos –dijo el, con la cabeza hacia abajo pero con sus ojos apuntados hacia ella- : dicho sea de paso, hoy te veo mucho mejor que la última sesión. Cierto?
- Si doctor, lo puedo sentir. –Suspiró, con una sonrisa que la hacía particularmente atractiva- Es más, para esta ocasión si tengo la posibilidad de hablarle… no se si recuerda que la semana pasada ni siquiera podía hablar del nudo de la garganta que tenía. Siempre he detestado llorar, sabe? Mi papá me decía que yo siempre tenía que defenderme con los ojos secos… eso se me quedó tan marcado, que aprendí a hacerlo. Y me siento completamente estúpida cuando el llanto me ahoga al punto que ni siquiera puedo expresarme… pero véame doctor! –mueve su cabeza como las modelos que mueven su pelo haciendo gala de su champú- No se si me veo, pero yo me siento radiante! Ando como extasiada…
- … Significa esto que volviste con tu novio, pícara? – dijo el quebrando la mitad derecha de su boca silueteando una pseudo sonrisa.
- Ay no! –le mira a los ojos con el ceño un poco fruncido pero con picardía- por que es que todos ustedes siempre piensan que cuando una anda contenta es por que me acosté con alguien? Tenga cuidado con tanto Freud! que no todo en la vida son orgasmos! O peor aún, puede que esa supuesta deducción lo esté poniendo a usted en evidencia de que el que anda por esos rumbos es usted.
- Tenés razón –dijo el, luego de carcajearse en una forma más libre-. Y bueno, tampoco podés negarme que nuestra sociedad es tan erotizada que tendemos a pensar que de veras toda plenitud se deriva del sexo. Pero se supone que el psicólogo aquí soy yo, así que basta de psicoanálisis… que aquí la que paga sos vos, y por lo tanto perdés plata al analizarme tanto. Ok?
La vez pasada me dejó preocupado lo que me contaste… parece que tu mala relación con tu mamá realmente ha inferido en vos… dijiste que te había maltratado mucho, que te sentías mal por que percibías que la odiabas, pero que sabías que eso era contranatural.
- Hasta ahí vamos bien, doc.
- Lloraste mucho, y ahí casi no pudiste hablar, cuando dijiste que no lograbas entender muchos de los maltratos que tuviste. Que no entendés muchas de las humillaciones que te hizo pasar, y que hoy, ya no viéndola como hija sino como mujer, no puedes entender por qué hizo las cosas que hizo. Verdad?
- Aja doctor. Eso exactamente.
- Recuerdo que mencionaste que últimamente la estabas viendo mucho en los sueños.
- Uy si … por eso lloraba tanto. No sabe lo reales que fueron esos sueños para mí. He escuchado gente decir que cuando se sueñan que se mueren los papás es una forma psicológica de eliminar los resentimientos que se tienen con ellos, matándolos… Yo hubiera cambiado mis sueños por uno así. Yo no tenía ese tipo de sueño…
- …Ese tipo de sueño –dijo el, sincronizado con la expresión de ella e interrumpiéndola para seguir el curso y apuntando con su dedo como advirtiendo-, sino, que por el contrario, solías soñar que estabas discutiendo con tu mamá acaloradamente. Y que te invadían a raíz de eso sentimientos de impotencia y que perdías tanto los estribos que sentías que la ibas a ma…
- Matar doctor –retoma ella la frase-. Si es cierto. No sabe el asco que me da de mi misma pensar que quería hacerle eso a mi madre… es como dejar de ser humano. Me sentía sucia, malévola, como demoníaca. Inferior.
- Sin embargo, me llama poderosamente la atención como me estas hablando hoy! Por que aunque sos descriptiva y utilizas sentimiento y aplomo en lo que decís que sentís, de alguna forma te escucho como… como si estuvieras viendo los toros desde la barrera… como que por lo menos en este momento estas enajenada de tu sentir, y que es casi como que me contaras que eso le pasó a alguna amiga, y no es ni sombra de la mujer de corazón desgarrado que escuché la consulta pasada.
- Es cierto… tiene usted razón. Hoy me siento diferente.
- Pero… y entonces que pasó? Es que te habías puesto tan mal que ni consejo te pude dar por que no sentí que tuvieras siquiera disposición a escucharme.
- Y no se equivocó … con mucha probabilidad lo hubiera enviado a freír churros. Pero no me lo tome a mal, no es por que usted lo hiciera mal, es que hay días en los que simplemente…
- No se puede. Yo entiendo, tranquila. Pero igual, hoy no es esa tu actitud. Parece que algo te hizo cambiar de mentalidad y de hecho como que tenés un peso menos de encima… qué pasó?
- (Suspira…) Verá doctor. Recuerdo que mi último sueño de ese tipo fue justamente la noche de la última sesión que tuve…. Esa noche mi mamá y yo habíamos tenido en el sueño un pleito, por alguna estupidez. En el sueño yo soy aún una adolescente, así que era algo como que yo deje la ropa mal puesta, o algo así…. Pero seguramente por haber tenido el tema presente tanto cuando estaba despierta, era como si me acordara de todo lo que habíamos conversado en el sueño.
- No entiendo… explicame eso bien…
- Es decir, que yo tenía muy claro en mi mente todo lo que habíamos conversado… sus maltratos, sus humillaciones, mis rencores, sus agresiones… Yo estaba asustada conmigo misma en el sueño, recuerdo que le pedía a Dios en una oración mientras ella me regañaba, que me diera paciencia para no pegarle, por que estaba ya con el puño cerrado. (La alegría que tenía de un momento a otro se comenzó a ir…)
- Le pegaste… verdad? Te desahogaste?
- No, es probable que hubiera sentido incluso en el sueño peso de conciencia… No, no le pegué. Todo lo contrario, boté el tapón. (Tenía su cabeza viendo hacia abajo… cuando levantó la vista, una lágrima recorría su mejilla izquierda…)Y le grité a mami: “Estoy harta mami, (le falta aire y vuelve a respirar) estoy realmente harta! Por qué no me decís que me vaya de la casa, para ya no estorbar mas nuestras existencias… Me voy mami, me largo de esta porquería, nunca le voy a quedar bien”… (Se tapó la cara con las manos y cada vez costaba más entenderle por los sollozos).
El doctor se levantó, sacó de la bolsa de desechables que tenía en sus estantes un vasito, y lo llenó de agua. Se la dio. Ella se la tomó y hubieron 2 minutos de silencio…
- Vamos amiguita… lo estabas haciendo bien… esta vez si vamos a terminar… vas a ver!
- (Sonríe, se limpia los ojos de una forma procedimental y delicada, para que no se le manche la cara con el color del lápiz de ojos)… Ok… si, yo puedo… ya casi termino de por sí. Pero el llorado de hoy es diferente doctor… ya verá!
- Le acababas de decir a tu mamá que te largabas, y con razón, de tu casa…
- Ah si… me iba… y bueno doctor, ahí es donde… se puede decir que Dios me contestó mis oraciones…
- En el sueño?
- Si… mami se quedó viéndome como… como… ha visto como se queda viendo una mamá a su hijo recién nacido? Con una especie de ternura… inclinaba la cabeza y sus ojos brillaban… ella no dijo nada, pero yo en mi sueño sentía que me veía como si fuera una bebé de un año… Se lo juro!
- Te sentiste mal?
- No, sentía como que me había literalmente hecho bebé y gozaba de los chineos de una bebé… es eso loco que pasa en los sueños que de un momento a otro suceden cosas irracionales, pero uno en su sueño entiende que es lo que esta pasando…
- Si si, como que estas en un cuarto de tu casa, pero cuando vuelves a otro lado, hay una habitación que realmente no existe en la casa, pero en el sueño sabés o sentís que es normal…
- Exactamente! Algo así… entonces, suspiró, y comenzó a… (Se volvió a tapar la cara… tenía los lados de la cara rojos, y esta vez se le interrumpió absolutamente su capacidad de hablar…)
- Te ofendió? Te reclamó? Te dijo que tenías que cambiarte los pañales?
- (Se carcajea) No doctor, usted si que inventa!
- Si te logra hacer hablar, seguiré…
- No pues… por lo menos me hace pasar de un estado a otro… bueno mami… mami… esto va a sonar tan estúpido…
- Podés dejarme el asunto de deducir a mí por favor?
- Bueno esta bien… mami comenzó a cantar una canción de cuna… pero… cómo le explico? Yo entendía en mi sueño que esa era la canción que mami usaba para dormirme cuando yo era bebé! Entonces tuve una especie de retrospección… me acordé cuando mami vivía para darme amor, antes de que llegaran los problemas, antes de que llegaran los prejuicios de ella hacia mí y viceversa… antes de que… Antes de que se nos embarrialara la cancha…
- Digámoslo asi: te sentiste chineada?
- Si, pero como nunca… ha visto como se ve un bebé cuando se le arrecuesta a una mamá en el hombro, que caen como… como rendidos y su forma de arrecostarse es como totalmente abierta? Como que no importa que se caiga el mundo pero ahí esta la mamá para cuidarlos sin que siquiera se puedan despertar?
- Aja, aja…
- Bueno, como así (sollozando de nuevo)… tuve una especie de regresión, y me sentí protegida de esa forma por mami… Lloré y lloré, pero ya no por rencor sino por emoción... me levanté suspirando de cuando en cuando, y de ahí en adelante no volví a tener la misma pesadilla...
- Qué interesante! Como que el subconsciente, vió que era demasiada la angustia y decidió volverte a ayudar a hacer las paces con tu mamá…
- Así suena muy técnico… para mí, Dios sabe que sí lo veo de esta forma, simplemente Dios me contestó una oración con un sueño milagroso…
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