8.5.06
Coprolalia
Dime de qué presumes, y te diré de qué careces…
Lo que más te dices ganar, es lo que no mereces…
Y si de la abundancia del corazón habla la boca
Me pregunto si habrá rescate para un espíritu de tan poca..
Profundidad en su corazón, algún valor en tal basurero
Hurgando entre lo vanal de un registro tonto y pendenciero
Dime qué queda cuando se han ido los transeúntes de tu parranda?
Quién te abraza tras ese forro de vacua coprolalia?
Qué hay cuando ya no hay tragos, cumbia hedionda y perversiones?
Queda algo cuando termina aquel show de topless diversiones?
Qué llena tu vida cuando se acaban tus asistidas erecciones?
Qué infiere en tu vida tu verborraica lista negra de confesiones?
De la abundancia del corazón habla la boca, dijo Jesús,
Abundás en triste escazéz de pensamiento y ni una luz
Detrás de tus carcajadas, tus tragos y tu gran relajo,
Escondes un niño triste, asustado, y en harapos…
Crées que puede hacerse algo con un espíritu desnutrido?
A quién culparás de un derrotero inmerso en lo podrido?
Quien te cose de nuevo cuando te rompas en tu charanga?
Por qué intentar infestarnos con tu sucia coprolalia?
Qué ganás con tu sexo si aún ignoras qué es el amor?
Por cierto, amor no es transitar juntos de la mano sin pudor
Dónde encontrás compromisos en medio de todos tus orgasmos,
El compromiso que salva cuando en tu vida no hay verano?
Cuán altiva será tu esquela de hombre pervertido,
Con mil quinientas diez hembras seguidoras de tu credo
Un tonto que no es ni un hombre; sino esclavo de su lujuria,
Impuesta por sociedades libidinosas en sus alcurnias?
No vengas a presumirme sobre vivir, sobre aventuras
No vengas a predicarme libertad con tus cadenas
No vendas delante de mío errores humanos como ideas sabias
No tengo intención de oírles, a otro lado con su coprolalia…
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